El diseño de juegos es alquimia y es arte. La alquimia trata de marcos de referencia, de estructuras que permiten avanzar más rápido. El arte es aquello que hace sentir y vibrar a las personas que juegan, la experiencia de juego. Diseñar juegos es un juego en sí mismo. Es aprendizaje y es crecimiento. Porque diseñar no solo va de mecánicas, ni de componentes, ni de dinámicas, ni de elementos. Va de personas y de momentos.